Visión general de la apertura de los datos culturales a escala internacional
Fecha de la noticia: 13-05-2016

Bajo el marco de los datos culturales se cobija información relativa a objetos, publicaciones, fotografías o colecciones musicales creados y distribuidos por todo tipo de instituciones pertenecientes al sector de la cultura y el arte. Dado el gran valor que encierra el patrimonio cultural, la Unión Europea, a través de su directiva 2013/37/UE - y traspuesta a la normativa nacional a través de la Ley 18/2015-, ha modificado el ámbito de aplicación de la reutilización de la información del sector público para incluir, así, a las bibliotecas, museos y archivos europeos.
No obstante, abrir dicha información supone un gran desafío ya que es imprescindible transformar toda esa variedad de contenido, junto a los metadatos que la acompañan (título, materiales, fechas, localizaciones, autores…), en formatos reutilizables y convertirla en accesible bajo una licencia abierta que permita su reutilización. Por estos motivos, la apertura de los datos culturales todavía es un movimiento incipiente al cual le queda camino que recorrer hasta alcanzar a otros sectores ya maduros en materia de datos abiertos.
A pesar de las dificultades, tras la apertura de los recursos culturales se esconden grandes beneficios. En primer lugar, publicar en abierto las colecciones de las instituciones aumentaría notablemente el acceso, la visibilidad y, por ende, la reutilización del patrimonio. Además, incentivaría la colaboración entre entidades de todo el mundo, impulsando la creación de nuevos servicios y un uso más creativo de los materiales.
Uno de los primeros y tímidos pasos hacia el open data cultural fue el proyecto The Commons, una iniciativa internacional para catalogar los archivos de fotos públicas bajo una licencia “sin restricciones conocidas de derechos de autor”. El primer museo en unirse a este proyecto, que hoy en día cuenta con más de un centenar de instituciones de todo el mundo, fue en 2008 el Museo Powerhouse de Sydney, el cual, solo un año más tarde, publicaba los metadatos de sus colecciones bajo la licencia CC-BY-SA que permite la reutilización, comercial o no, de la información.
En 2011, el Museo Británico lanzaba su servicio de linked data junto a una licencia más abierta para sus colecciones al mismo tiempo que la biblioteca digital europea Europeana publicaba una API que actualmente da acceso a más de cuarenta millones de registros procedentes de 1.500 museos, bibliotecas, archivos y colecciones audiovisuales de toda Europa. Además, a parte de un portal de datos abiertos propio, esta plataforma cuenta con una sección donde publica regularmente herramientas, aplicaciones reales y casos prácticos de reutilización de datos abiertos culturales.
Actualmente, uno de los museos pioneros en todo el mundo en materia de apertura de información cultural es el centro danés SMK que ha publicado en su página web más de 25.000 imágenes de sus piezas de arte de dominio público, sin restricción alguna a su reutilización. De esta manera, docentes, escolares, investigadores o usuarios en general puede utilizar las fotografías para cualquier uso comercial, académico o científico que deseen.
A escala nacional, un ejemplo reseñable de la apuesta por la apertura del open data cultural en España es el trabajo realizado por la Biblioteca Nacional de España que cuenta con su propio Plan de Reutilización de la Información del Sector Público y un portal de datos abiertos, y la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes en cuyo portal de datos se encuentran más de 200.000 archivos, publicados y almacenados en formato RDF garantizando la interoperabilidad de los mismos. Además, los recursos producidos por esta institución digital cuentan con un código identificador permanente que permite la creación de enlaces duraderos.
Internet ha supuesto una oportunidad sin precedentes para que estas entidades se acerquen a mayores audiencias al mismo tiempo que permiten a los usuarios disfrutar, contribuir, participar y compartir el patrimonio artístico. Con el fin de ayudar a las instituciones culturales en su viaje hacia la apertura, nace la iniciativa OpenGLAM la cual promueve el acceso libre y abierto de la herencia cultural y digital de galerías, bibliotecas, archivos y museos de todo el mundo; cumpliendo con estos cinco principios:
1. Publicación de la información digital sobre las obras (metadatos) utilizando una herramienta legal apropiada como la licencia Creative Commons Zero Waiver.
2.Mantenimiento de las representaciones digitales de aquellas obras cuyo copyright ha expirado como dominio público, sin añadirles nuevos derechos.
3. Declaración explícita del compromiso a respetar la reutilización de las descripciones, colecciones de datos y sus subconjuntos una vez publicados.
4. Uso de formatos de archivos abiertos y legibles por máquinas para publicar los datos.
5. Búsqueda de nuevas formas de colaboración, servicios y contenidos que enriquezcan los metadatos existentes y permitan a los usuarios reutilizar la información publicada.
Dado el valor innegable de los datos abiertos, cada vez más instituciones culturales apuestan por la publicación bajo licencias abiertas de su contenido digital, así como por la creación de APIs que permiten a los programadores trabajar con su información. No obstante, este sector aún necesita seguir trabajando en su esfuerzo por hacer accesible el gran volumen de datos que custodia; lo que supondría un nuevo éxito para la comunidad open data internacional que busca la apertura de la información sea cual sea el origen de ésta.