
Para alcanzar sus objetivos de sostenibilidad medioambiental, Europa necesita información precisa, accesible y actualizada que permita tomar decisiones basadas en evidencias. El Espacio de Datos del Pacto Verde (Green Deal Data Space o GDDS) facilitará esta transformación al integrar diversas fuentes de datos en una infraestructura digital común, interoperable y abierta.
Desde Europa, se está trabajando en su desarrollo a través de diversos proyectos, que han permitido obtener recomendaciones y buenas prácticas para su implementación. ¡Descúbrelas en este artículo!
¿Qué es el Green Deal Data Space?
El Green Deal Data Space (GDDS) es una iniciativa de la Comisión Europea para crear un ecosistema digital que reúna datos de múltiples sectores. Su fin es apoyar y acelerar los objetivos del Pacto Verde: la hoja de ruta de la Unión Europea para lograr una economía sostenible, climáticamente neutra y justa. Los pilares del Pacto Verde incluyen:
- Una transición energética que reduzca las emisiones y mejore la eficiencia.
- El fomento de la economía circular, promoviendo el reciclaje, la reutilización y la reparación de productos para minimizar residuos.
- El impulso de prácticas agrícolas más sostenibles.
- La restauración de la naturaleza y la biodiversidad, protegiendo hábitats naturales y reduciendo la contaminación de aire, agua y suelo.
- La garantía de la justicia social, a través de una transición que facilite que ningún país o comunidad quede atrás.
A través de esta estrategia integral, la UE aspira a convertirse en la primera economía del mundo competitiva y eficiente en el uso de los recursos, logrando emisiones netas de gases de efecto invernadero cero para 2050. El Espacio de Datos del Pacto Verde se posiciona como una herramienta clave para alcanzar estos objetivos. Integrados en la Estrategia Europea del Dato, los espacios de datos son entornos digitales que permite el intercambio fiable de datos, al tiempo que se mantiene la soberanía y se garantiza la confianza y la seguridad en virtud de un conjunto de normas acordadas mutuamente.
En este caso concreto, el GDDS integrará datos de gran valor sobre biodiversidad, contaminación cero, economía circular, cambio climático, servicios forestales, movilidad inteligente y cumplimiento medioambiental. Estos datos serán fáciles de localizar, interoperables, accesibles y reutilizables bajo los principios FAIR (Findability, Accessibility, Interoperability, Reusability).
El GDDS se implementará a través del proyecto SAGE (Espacio de datos para una Europa verde y sostenible) y se basará en los resultados de la iniciativa GREAT (Gobernanza de la innovación responsable).
Un informe con recomendaciones para el GDDS
Como vimos en un artículo anterior, cuatro proyectos pioneros están sentando las bases de este ecosistema: AD4GD, B-Cubed, FAIRiCUBE y USAGE. Estos proyectos, financiados en el marco de la convocatoria HORIZON, han analizado y documentado durante varios años los requisitos necesarios para garantizar que el GDDS siga los principios FAIR. Fruto de ese trabajo, se ha elaborado el informe “Policy Brief: Unlocking The Full Potential Of The Green Deal Data Space”. Se trata de un conjunto de recomendaciones que buscan servir de guía para la implementación exitosa del Espacio de Datos del Pacto Verde.
El informe destaca cinco grandes áreas en las que se concentran los desafíos de la construcción del GDDS:
1. Armonización de datos
Los datos ambientales son heterogéneos, ya que provienen de distintas fuentes: satélites, sensores, estaciones meteorológicas, registros de biodiversidad, empresas privadas, institutos de investigación, etc. Cada proveedor utiliza sus propios formatos, escalas y metodologías. Esto provoca incompatibilidades que dificultan la comparación y la combinación de datos. Para solucionarlo, es esencial:
- Adoptar estándares y vocabularios internacionales ya existentes, como INSPIRE, que abracan múltiples ámbitos temáticos.
- Evitar formatos propietarios, primando aquellos abiertos y bien documentados.
- Invertir en herramientas que permitan transformar datos de un formato a otro de forma sencilla.
2. Interoperabilidad semántica
Garantizar la interoperabilidad semántica es crucial para que los datos puedan entenderse y reutilizarse en diferentes contextos y disciplinas, algo fundamental cuando se comparten datos entre comunidades tan diversas como las que participan en los objetivos del Pacto Verde. A ello hay que sumar que la Ley de Datos (Data Act) obliga a que los participantes en espacios de datos ofrezcan descripciones legibles por máquinas de los datasets, garantizando así su localización, acceso y reutilización. Además, exige que los vocabularios, taxonomías y listas de códigos empleados estén documentados de forma pública y coherente. Para lograrlo es necesario:
- Usar datos enlazados (linked data) y metadatos que ofrezcan conceptos claros y compartidos, a través de vocabularios, ontologías y estándares como los desarrollados por el OGC o las normas ISO.
- Usar los estándares que ya existen para organizar y describir los datos, y solo crear extensiones nuevas cuando sea realmente necesario.
- Mejorar los vocabularios internacionales ya aceptados, dándoles más precisión y aprovechando que las comunidades científicas ya los utilizan ampliamente.
3. Metadatos y curación de datos
Los datos solo alcanzan su máximo valor si están acompañados de metadatos claros que expliquen su origen, calidad, restricciones de uso y condiciones de acceso. Sin embargo, la gestión deficiente de metadatos sigue siendo una barrera importante. En muchos casos, los metadatos son inexistentes, están incompletos o mal estructurados, y a menudo se pierden al traducirse entre estándares no interoperables. Para mejorar esta situación se debe:
- Ampliar los estándares de metadatos existentes para incluir elementos críticos como observaciones, mediciones, trazabilidad de origen, etc.
- Fomentar la interoperabilidad entre estándares de metadatos en uso, mediante herramientas de mapeo y transformación que respondan tanto a las necesidades de datos comerciales como abiertos.
- Reconocer y financiar la creación y mantenimiento de metadatos en proyectos europeos, incorporando la obligación de generar un catálogo estandarizado desde el inicio en los planes de gestión de datos.
4. Intercambio de datos y provisión federada
El GDDS no busca solo centralizar toda la información en un solo repositorio, sino permitir que múltiples actores compartan datos de manera federada y segura. Por tanto, es necesario conseguir un equilibrio entre el acceso abierto y la protección de derechos y privacidad. Para ello se requiere:
- Adoptar y promover tecnologías abiertas y fáciles de usar, que permitan la integración entre datos abiertos y protegidos, cumpliendo con el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD).
- Garantizar la integración de diversas API utilizadas por los proveedores de datos y las comunidades de usuarios, acompañadas de demostradores y directrices claras. No obstante, es necesario impulsar el uso de API estandarizadas para facilitar una implantación más fluida, como por ejemplo, las API de OGC (Open Geospatial Consortium) para activos geoespaciales.
- Ofrecer herramientas de conversión y especificaciones claras para permitir la interoperabilidad entre API y formatos de datos.
En paralelo al desarrollo del Eclipse Dataspace Connectors (una tecnología de código abierto para facilitar la creación de espacios de datos), se propone explorar alternativas como catálogos en blockchain o certificados digitales, siguiendo ejemplos como el sistema FACTS (Federated Agile Collaborative Trusted System).
5. Gobernanza inclusiva y sostenible
El éxito del GDDS dependerá de establecer un marco de gobernanza sólido que garantice transparencia, participación y sostenibilidad a largo plazo. No se trata solo de normas técnicas, sino también de reglas justas y representativas. Para avanzar en ello es clave:
- Usar exclusivamente nubes europeas para asegurar la soberanía de los datos, reforzar la seguridad y cumplir con la normativa de la UE, algo que cobra especial importancia ante los desafíos globales actuales.
- Integrar plataformas abiertas como Copernicus, el Portal Europeo de Datos e INSPIRE en el GDDS fortalece la interoperabilidad y facilita el acceso a datos públicos. En este sentido, es necesario diseñar estrategias eficaces para atraer proveedores de datos abiertos y evitar que el GDDS se convierta en un entorno comercial o restringido.
- Obligar a citar los datos en publicaciones académicas financiadas con fondos públicos aumenta su visibilidad y apoyar iniciativas de estandarización fortalece la visibilidad de los datos y asegura su mantenimiento a largo plazo.
- Ofrecer formación integral y promover el uso cruzado de herramientas de armonización evita la creación de nuevos silos de datos y mejora la colaboración entre dominios.
La siguiente imagen resume la relación entre estos bloques:
Conclusión
Todas estas recomendaciones inciden en una idea central: construir un Espacio de Datos del Pacto Verde que cumpla con los principios FAIR no solo es una cuestión técnica, sino también estratégica y ética. Requiere colaboración entre sectores, compromiso político, inversión en capacidades y una gobernanza inclusiva que garantice la equidad y la sostenibilidad. Si Europa logra consolidar este ecosistema digital, estará mejor preparada para afrontar los desafíos medioambientales con decisiones informadas, transparentes y orientadas al bien común.