El papel de los datos abiertos y la inteligencia artificial en el Pacto Verde Europeo

Berriaren data: 11-08-2020

Pacto verde europeo

Hace tan solo unos meses, en noviembre de 2019 Ursula von der Leyen, aún como candidata a la nueva Comisión Europea 2019-2024, presentó el desarrollo de un Pacto Verde Europeo como la primera de las seis líneas maestras que configurarían las ambiciones de su mandato. 

La situación global ha cambiado radicalmente en los poco más de seis meses transcurridos desde entonces debido al impacto de la pandemia de COVID-19 y por ello han saltado por los aires muchos planes estratégicos de empresas de prácticamente todos los sectores y muchas hojas de ruta y políticas públicas de los gobiernos. A pesar de la gran incertidumbre en la que nos encontramos, lo que está claro es que deberá abordarse una profunda revisión para adaptar estas políticas y planes a la nueva realidad que aún está configurándose.  

Sin embargo, parece indudable que la necesidad y conveniencia del Pacto Verde Europeo se ha visto reforzada en el contexto actual. El Pacto Verde fue concebido como un motor para la transformación de la economía europea en las próximas décadas, pero las circunstancias lo han convertido en un pilar fundamental para la reconstrucción de la economía europea en el corto plazo después deshock inducido por los confinamientos de la población. 

En este sentido, la Unión Europea tiene una importante ventaja respecto a otros actores globales y es que en gran medida sus prioridades ya están alineadas con los principales desafíos a los que nos enfrentaremos según vaya remitiendo la crisis sanitaria. En todo caso, una estrategia de crecimiento de la UE que aspira a convertir Europa en un continente sin emisiones contaminantes en 2050, puede que ahora no nos parezca suficientemente ambiciosa y juzguemos pertinente incluso acelerar esta transición. 

El plan para el despliegue del Pacto Verde Europeo se publicó con un calendario tentativo muy ambicioso que prevé el desarrollo entre 2020 y 2021 de las acciones correspondientes a los principales ámbitos clave: ambición climática, energía limpia, segura y asequible, estrategia industrial para la economía circular y limpia, movilidad sostenible e inteligente, política agraria común beneficiosa para el medio ambiente y polución cero y medio ambiente libre de tóxicos. 

Si analizamos los ámbitos principales de actuación del Pacto Verde, vemos claramente que las innovaciones basadas en datos e inteligencia artificialjunto con otras tecnologías específicas, serán claves para resolver una buena parte de los retos que pretende abordar. Y por supuesto todos los documentos ya publicados así lo reconocen, integrando datos, datos abiertos, inteligencia artificial y otras tecnologías en las diferentes acciones previstas. Las que ya están disponibles indican claramente el camino que seguirán las líneas de trabajo que se irán aprobando en los próximos años. 

Estrategia de la UE sobre la biodiversidad de aquí a 2030  

La estrategia europea sobre biodiversidad para reintegrar la naturaleza en nuestras vidas, publicada el 20 de mayo de 2020, reconoce que “la inversión en investigación, innovación e intercambio de conocimientos será clave para obtener los mejores datos y desarrollar las mejores soluciones basadas en la naturaleza”. Como ejemplo, cita la evaluación de la salud de los bosques europeos, donde la Comisión Europea se compromete a “trabajar con otros proveedores de datos para seguir desarrollando el Sistema de Información Forestal para Europa”. Estos compromisos representan una buena oportunidad para el sector forestal español en su camino para la transición hacia un enfoque de industria forestal de precisión. 

Además, la estrategia cita expresamente “la necesidad de eliminar las capturas incidentales de especies en peligro de extinción o reducirlas a un nivel que permita una recuperación total”. Para ello, se propone intensificar la recogida de datos sobre las capturas incidentales de todas las especies sensibles. En este sentido está orientado el proyecto premiado en el desafío Aporta 2019, Sistema Optimatics, que está diseñado para contribuir a que los pescadores puedan tomar decisiones en tiempo real y así racionalizar la pesca en los caladeros. 

En definitiva, la estrategia europea sobre biodiversidad pretende que la investigación y la innovación ayuden a la Comisión a apoyar y financiar las inversiones en soluciones basadas en la naturaleza proporcionando criterios objetivos para dar prioridad a soluciones «verdes» frente a soluciones «grises» 

Estrategia «de la granja a la mesa» 

La estrategia “de la granja a la mesa para un sistema alimentario justo, saludable y respetuoso con el medio ambiente, publicada también el 20 de mayo de 2020, pretende garantizar que los europeos dispongan de alimentos asequibles y sostenibles, combatir el cambio climático, proteger el medio ambiente y la biodiversidad y aumentar la agricultura ecológica. Esta ambiciosa línea de acción también integra el uso de datos e inteligencia artificial en numerosas partes. 

Por ejemplo, reconoce que el espacio común europeo de datos sobre agricultura, definido en la estrategia europea de datos, “mejorará la sostenibilidad competitiva de la agricultura de la Unión mediante el tratamiento y análisis de datos sobre producción, uso del suelo, medio ambiente y de otros tipos”, para a continuación aclarar que estos datos permitirán “la aplicación precisa y adaptada de los enfoques de producción a nivel de explotación agrícola y el seguimiento de los resultados del sector, además de apoyar la iniciativa sobre la captura de carbono en suelos agrícolas”. Esto es, una orientación clara hacia la agricultura de precisión. 

La herramienta clave para conseguir estos objetivos y que la transición sea justa y beneficiosa para todos es la Política Agraria Común, que debe estar completamente alineada con el Pacto Verde. La nueva PAC, propuesta por la Comisión en junio de 2018, tiene por objeto ayudar a los agricultores a mejorar su rendimiento medido en criterios medioambientales y climáticos. Para ello propone, por ejemplo, un mejor uso de los datos y análisis y un mayor énfasis en la inversión en tecnologías y prácticas ecológicas y digitales.  

Los programas de la Unión Europea Copernicus y la Red Europea de Observación e Información del Mar (EMODnet), fuentes de datos abiertos de gran importancia, se citan en cuanto a su contribución para reducir los riesgos de las inversiones y como facilitadores de prácticas sostenibles en el sector de la pesca y la acuicultura.  

La mejora de los sistemas de recopilación de datos como el Reglamento de 2009 relativo a las estadísticas de plaguicidas o la Red de Información Contable Agrícola también son objeto de atención y se dejan previstas mejoras que contribuyan tanto a subsanar las carencias existentes actualmente en los datos disponibles como a promover la elaboración de políticas basadas en evidencias. 

Nuevo Plan de acción para la economía circular 

El Nuevo Plan de acción para la economía circular por una Europa más limpia y más competitiva, publicado el 11 de marzo de 2020 reconoce también un papel decisivo a la investigación, la innovación y la digitalización y por tanto de los datos durante la transición. En esta línea se pretende, por ejemplo, fomentar la divulgación de datos ambientales por parte de las empresas lcual les obligará a mejorar sus sistemas de captura de datos y monitorización de objetivos. 

Del mismo modo se mencionan modelos de innovación basados en la personalización masiva o en una relación más estrecha con los clientes, que puedan acelerar la circularidad y la desmaterialización de nuestra economía. Estos modelos solo serán posibles utilizando de forma intensiva datos e inteligencia artificial combinados con otras tecnologías tales como blockchain o internet de las cosas. 

Además, la Comisión Europea definirá un espacio europeo de datos para aplicaciones circulares inteligentes, con datos sobre las cadenas de valor e información sobre productos que proporcionará la arquitectura y el sistema de gobernanza necesarios para promover aplicaciones y servicios como los pasaportes de producto, el mapeo de recursos y la información a los consumidores. 

Como parte del plan se seguirán desarrollando los indicadores, y por tanto los sistemas de recogida de datos, sobre el uso de los recursos, en particular en lo referente a las huellas de consumo y de materiales, que se asociarán al proceso de seguimiento y evaluación de los avances obtenidos.  

Datos abiertos  

Finalmente cabe resaltar cómo se están empleando los datos abiertos a nivel europeo para fomentar el desarrollo de nuevas solucionesLa competición de datos abiertos que organiza de forma anual la Unión Europea, el EUDatathon, ha dedicado en 2020 el primero de sus cuatro desafíos al Pacto Verde Europeo. La Oficina de Publicaciones de la Unión Europea, organizadora de la competición, ha recibido 30 propuestas (25% del total) dirigidas a este desafío, lo cual es un éxito notable teniendo en cuenta la novedad de un concepto forjado apenas en los últimos meses.  

Este interés de la comunidad de datos abiertos también se ha visto reflejado en la participación española que, con 4 propuestas ha sido el segundo país más comprometido con el desafío Verde. Entre las 3 propuestas preseleccionadas para la fase final, se encuentra una española, Dataseeds, que tiene como objetivo ayudar a las PYME del sector de la agricultura a contribuir a la reestructuración ecológica de la industria de la UE. 

Sin duda, la nueva estrategia de crecimiento de la Unión Europea, representa una nueva fuente de oportunidades para todos los sectores económicos, pero en todas ellas los datos van a representar un factor clave para su desarrollo, aumentando el potencial de otras tecnologías como la inteligencia artificial y el conocimiento específico de cada dominio. Y en España disponemos de un enorme potencial tanto en forma de recursos naturales como en forma de capacidades que pueden aprovechar esta fuente de oportunidades y generar ventajas competitivas en muchos sectores durante esta transición que acaba de comenzar.


Contenido elaborado por Jose Luis Marín, Senior Consultant in Data, Strategy, Innovation & Digitalization.

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