Data publicació 15/10/2025
Recursos Educativos Abiertos (REA): innovación, colaboración y acceso universal
Descripció

La educación tiene el poder de transformar vidas. Reconocida como un derecho fundamental por la comunidad internacional, constituye un pilar clave para el desarrollo humano y social. Sin embargo, según datos de la UNESCO, 272 millones de niños y jóvenes siguen sin acceso a la escuela, el 70% de los países destina menos del 4% de su PIB a la educación y aún son necesarios 69 millones de docentes más para lograr la educación primaria y secundaria universal en 2030. Ante este desafío global, los recursos educativos abiertos y las iniciativas de acceso libre se presentan como herramientas decisivas para fortalecer los sistemas de enseñanza, reducir desigualdades y avanzar hacia una educación inclusiva, equitativa y de calidad.

Los recursos educativos abiertos (REA) ofrecen tres beneficios principales: aprovechan las posibilidades de las tecnologías digitales para solucionar retos educativos comunes; actúan como catalizadores de innovación pedagógica y social al transformar la relación entre docentes, estudiantes y conocimiento; y contribuyen a mejorar el acceso equitativo a materiales educativos de alta calidad.

Qué son los recursos educativos abiertos (REA)

Según la UNESCO, los recursos educativos abiertos son "materiales de aprendizaje, enseñanza e investigación en cualquier formato y soporte que existen en el dominio público o están bajo derechos de autor y fueron liberados bajo una licencia abierta". El concepto, acuñado en el foro celebrado en París en el año 2002, tiene como característica fundamental que estos recursos permiten "su acceso sin coste, su reutilización, reorientación, adaptación y redistribución por parte de terceros".

Los REA abarcan una amplia variedad de formatos, desde cursos completos, libros de texto y programas curriculares hasta mapas, vídeos, pódcasts, aplicaciones multimedia, herramientas de evaluación, aplicaciones móviles, bases de datos e incluso simulaciones.

Los recursos educativos abiertos están constituidos por tres elementos que funcionan de manera inseparable:

  1. Contenidos educativos: incluyen todo tipo de material utilizable en el proceso de enseñanza-aprendizaje, desde objetos formales hasta recursos externos y sociales. Es aquí donde entrarían los datos abiertos, los cuales se pueden aprovechar para generar este tipo de recursos.
  2. Herramientas tecnológicas: software que permite desarrollar, utilizar, modificar y distribuir el contenido, incluyendo aplicaciones para la creación de contenidos y plataformas para comunidades de aprendizaje.
  3. Licencias abiertas: elemento diferenciador que respeta la propiedad intelectual mientras proporciona permisos para el uso, adaptación y redistribución de los materiales.

Por tanto, los REA se caracterizan principalmente por su accesibilidad universal, eliminando barreras económicas y geográficas que tradicionalmente limitan el acceso a la educación de calidad.

Innovación educativa y transformación pedagógica

La transformación pedagógica constituye uno de los principales impactos de los recursos educativos abiertos en el panorama educativo actual. Los REA no son simples contenidos digitales gratuitos, sino catalizadores de innovación que están redefiniendo los procesos de enseñanza-aprendizaje a nivel global.

Combinados con metodologías pedagógicas adecuadas y objetivos de aprendizaje bien diseñados, los REA ofrecen nuevas opciones de enseñanza innovadoras para lograr que tanto los docentes como los estudiantes asuman un papel más activo en el proceso educativo e incluso en la creación de contenidos. Fomentan competencias esenciales como el pensamiento crítico, la autonomía y la capacidad de “aprender a aprender”, superando los modelos tradicionales basados en la memorización.

La innovación educativa impulsada por los REA se materializa a través de herramientas tecnológicas abiertas que facilitan su creación, adaptación y distribución. Programas como eXeLearning permiten desarrollar contenidos educativos digitales de manera sencilla, mientras que LibreOfficeInkscape ofrecen alternativas libres para la producción de materiales.

La interoperabilidad lograda mediante estándares abiertos, como IMS GlobalSCORM, garantiza que estos recursos puedan integrarse en diferentes plataformas y, por tanto, la accesibilidad para todos los usuarios, incluidas personas con discapacidades.

Otra innovación prometedora para el futuro de los REA es la combinación de tecnologías descentralizadas como Nostr con herramientas de autoría como LiaScript. Este enfoque resuelve la dependencia de servidores centrales, permitiendo crear un curso completo y distribuirlo a través de una red abierta y resistente a la censura. El resultado es un único y permanente enlace (URI de Nostr) que encapsula todo el material, otorgando al creador la soberanía total sobre su contenido y garantizando su perdurabilidad. En la práctica, esto supone una revolución para el acceso universal al conocimiento. Los educadores comparten su trabajo con la seguridad de que el enlace será siempre válido, mientras que los estudiantes acceden al material de forma directa, sin necesidad de plataformas o intermediarios. Esta sinergia tecnológica es un paso fundamental para materializar la promesa de un ecosistema educativo verdaderamente abierto, resiliente y global, donde el conocimiento fluye sin barreras.

El potencial de los Recursos Educativos Abiertos se concreta gracias a las comunidades y proyectos que los desarrollan y difunden. Iniciativas institucionales, repositorios colaborativos y programas promovidos por organismos públicos y docentes aseguran que los REA sean accesibles, reutilizables y sostenibles.

Colaboración y comunidades de aprendizaje abiertas

La dimensión colaborativa representa uno de los pilares fundamentales que sostienen el movimiento de recursos educativos abiertos. Este enfoque trasciende fronteras y conecta a profesionales de la educación a nivel global.

Las comunidades educativas alrededor de los REA han generado espacios donde docentes comparten experiencias, acuerdan aspectos metodológicos y resuelven dudas sobre la aplicación práctica de estos recursos. La coordinación entre profesionales suele producirse en redes sociales o a través de canales digitales como Telegram, en los que participan tanto usuarios como creadores de contenidos. Este "claustro virtual" facilita la implementación efectiva de metodologías activas en el aula.

Más allá de los espacios surgidos por iniciativa de los propios docentes, distintos organismos e instituciones han promovido proyectos colaborativos y plataformas que facilitan la creación, el acceso y el intercambio de Recursos Educativos Abiertos, ampliando así su alcance e impacto en la comunidad educativa.

Proyectos y repositorios de REA en España

En el caso de España, los Recursos Educativos Abiertos cuentan con un ecosistema consolidado de iniciativas que reflejan la colaboración entre administraciones públicas, centros educativos, comunidades docentes y entidades culturales. Plataformas como Procomún, proyectos de creación de contenidos como EDIA (Educativo, Digital, Innovador y Abierto) o CREA (Creación de Recursos Educativos Abiertos), y repositorios digitales como Hispana muestran la diversidad de enfoques adoptados para poner a disposición de la ciudadanía recursos educativos y culturales en abierto. A continuación, te contamos un poco más sobre ellos:

  • El Proyecto EDIA (Educativo, Digital, Innovador y Abierto), desarrollado por el Centro Nacional de Desarrollo Curricular en Sistemas no Propietarios (CEDEC), se centra en la creación de recursos educativos abiertos diseñados para integrarse en entornos que fomentan las competencias digitales y que se adaptan a metodologías activas. Los recursos se crean con eXeLearning, que facilita la edición, e incluyen plantillas, guías, rúbricas y todos los documentos necesarios para llevar al aula la propuesta didáctica.
  • La red Procomún nació fruto del Plan de Cultura Digital en la Escuela puesto en marcha en 2012 por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. Actualmente este repositorio cuenta con más de 74.000 recursos y 300 itinerarios de aprendizaje, junto a un banco multimedia de 100.000 activos digitales bajo la licencia Creative Commons y que, por tanto, se pueden reutilizar para crear nuevos materiales. Dispone, además, de una aplicación móvil. Procomún también utiliza eXeLearning y el estándar LOM-ES, lo que asegura una descripción homogénea de los recursos y facilita su búsqueda y clasificación. Además, es una web semántica, lo que supone que puede conectarse con comunidades existentes a través de la Linked Open Data Cloud.
  • Desde las comunidades autónomas también se ha promovido la creación de recursos educativos abiertos. Un ejemplo es CREA, un programa de la Junta de Extremadura orientado a la producción colaborativa de recursos educativos abiertos. Su plataforma permite al profesorado crear, adaptar y compartir materiales didácticos estructurados, integrando contenidos curriculares con metodologías activas. Los recursos se generan en formatos interoperables y se acompañan de metadatos que facilitan su búsqueda, reutilización e integración en distintas plataformas.

    Existen iniciativas similares, como el proyecto REA-DUA en Andalucía, que aglutina más de 250 recursos educativos para primaria, secundaria y bachillerato, con atención a la diversidad. Por su parte, Galicia puso en marcha el curso 2022-23 cREAgal cuyo portal cuenta en la actualidad con más de 100 recursos de educación primaria y secundaria. Este proyecto incide en la inclusión y promueve la autonomía personal del alumnado. Además, desde algunas consejerías de educación se ponen a disposición recursos educativos abiertos, como es el caso de Canarias.

Hispana, el portal de acceso al patrimonio cultural español

Además de estas iniciativas orientadas a la creación de recursos educativos, han surgido otras que promueven la recopilación de contenidos que no fueron creados con un fin educativo pero que pueden ser utilizados en el aula. Es el caso de Hispana, un portal de agregación de fondos digitales de bibliotecas, archivos y museos españoles.

Para proporcionar acceso al patrimonio cultural y científico español, Hispana recolecta y hace accesibles los metadatos de los objetos digitales, permitiendo visualizar dichos objetos a través de enlaces que dirigen a las páginas de las instituciones propietarias. Además de actuar como recolector, Hispana también agrega el contenido de las instituciones que lo deseen a Europeana, la biblioteca digital europea, lo que permite aumentar la visibilidad y reutilización de los recursos.

Hispana es un repositorio OAI-PMH, lo que significa que utiliza el protocolo Open Archives Initiative – Protocol for Metadata Harvesting, un estándar internacional para la recolección e intercambio de metadatos entre repositorios digitales. Así, Hispana recolecta los metadatos de los archivos, museos y bibliotecas españoles que exponen sus fondos con este protocolo y los envía a Europeana.

Iniciativas internacionales y cooperación global

A nivel global es importante destacar el papel de la Unesco a través de la Coalición Dinámica sobre los REA, que busca coordinar esfuerzos para aumentar la disponibilidad, calidad y sostenibilidad de estos activos.

En Europa, ENCORE+ (European Network for Catalysing Open Resources in Education) busca fortalecer el ecosistema europeo de REA. Entre sus objetivos se encuentra crear una red que conecte universidades, empresas y organismos públicos para impulsar la adopción, reutilización y calidad de los REA en Europa. ENCORE+ promueve, además, la interoperabilidad entre plataformas, la estandarización de metadatos y la cooperación para garantizar la calidad de los recursos.

En Europa se han desarrollado otras iniciativas interesantes como EPALE (Electronic Platform for Adult Learning in Europe), una iniciativa de la Comisión Europea dirigida a los especialistas en educación para personas adultas. La plataforma contiene estudios, informes y materiales formativos, muchos de ellos bajo licencias abiertas, lo que contribuye a la difusión y uso de los REA.

Además, existen numerosos proyectos que generan y ponen a disposición recursos educativos abiertos en todo el mundo. En Estados Unidos, OER Commons funciona como un repositorio global de materiales educativos de diferentes niveles y materias. Este proyecto utiliza Open Author, un editor en línea que facilita que docentes sin conocimientos técnicos avanzados creen y personalicen recursos educativos digitales directamente en la plataforma.

Otro proyecto destacado es el Plan Ceibal, un programa público en Uruguay que representa un modelo de inclusión tecnológica para la igualdad de oportunidades. Además de proveer acceso a tecnología, genera y distribuye REA en formatos interoperables, compatibles con estándares como SCORM y metadatos estructurados que facilitan su búsqueda, integración en plataformas de aprendizaje y reutilización por parte del profesorado.

Junto a iniciativas como estas, existen otras que, aunque no producen recursos educativos abiertos de manera directa, sí fomentan su creación y uso mediante la colaboración entre docentes y estudiantes de diferentes países. Es el caso de proyectos como eTwinning y Global Classroom.

La fortaleza de los REA radica en su contribución a la democratización del conocimiento, su naturaleza colaborativa y su capacidad para impulsar metodologías innovadoras. Al derribar barreras geográficas, económicas y sociales, los recursos educativos abiertos hacen que el derecho a la educación esté un poco más cerca de convertirse en una realidad universal.